Page 53 - Revista GEHESC Nº1 - Noviembre 2024
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Finalmente en 1881, al fundarse el Colegio de Como las familias eran numerosas, la destreza de las
Parteras, se contó con el apoyo de la reconocida parteras fue muy valorada. Para las mujeres
enfermera Florence Nightingale. Recién comenzado inmigrantes establecidas en zonas remotas, o para la
el siglo XX, se promulgó la Ley de Parteras (1902) que colectividad galesa que eligió el aislamiento
aseguraba el entrenamiento y la supervisión de las deliberadamente, el nacimiento podía llegar a ser
mismas, creando un Consejo que cumpliría esa una experiencia solitaria y peligrosa porque en
función también en Gales.(5) algunos lugares no existían condiciones higiénicas
eguidamente presentamos la situación de las adecuadas. Por esa razón, tanto la mujer como su
“comadronas”(6) o parteras (7) en la colonia galesa partera debían estar preparadas para el nacimiento,
del Chubut. Las describimos como mujeres que tenían o para la muerte que era una posibilidad.
el oficio de ayudar a otra durante el alumbramiento, Si la vida de la madre o de su bebé estaba en
que iban a domicilio y que sólo poseían ese peligro, ellas parecían estar entrenadas para
conocimiento específico adquirido por la empiria. responder a esas irregularidades.(10)
Eran conocidas con el nombre galés de Bydwraig Frecuentemente aparecían situaciones como fiebre
que significa literalmente “la mujer que nos recibe o alta, hemorragia puerperal, cianosis del recién
que nos trae al mundo”. La idea de una mujer vecina nacido o un embarazo ectópico, todas
con ciertas habilidades adquiridas para atender el complicaciones muy difíciles de resolver en esa
parto en una zona rural, en un contexto pionero, crea época. La prueba fehaciente es que muchas madres
un retrato homogéneo de los orígenes de la yacen enterradas con sus bebes y son el testimonio
“obstetricia histórica”.(8) mudo del sufrimiento de las pioneras. Algunas
En general, en nuestro país, los estudios sobre las parteras se ocupaban del troi y corff (acondicionar
mujeres inmigrantes no presentan mucha información el cuerpo), es decir, asistir en la muerte, y preparar a
sobre los partos y también se nota la ausencia de la difunta para el entierro, bañándola, vistiéndola y
estudios de caso o análisis comparativos. arreglándola dentro del féretro.(11)
Ante esa situación de abandono, por no contar con la Aunque no hay evidencias de que la atención de la
asistencia de un médico, algunos integrantes del partera redujera la mortalidad maternal e infantil,
primer contingente se ocuparon de la salud desde el como vivían en las cercanías podían llegar cuando se
primer momento. Ellos fueron Rhydderch Huws las convocaba. Era importante permanecer con la
(idóneo en farmacia y ex-partero del Hospital de parturienta todo el tiempo que fuera necesario para
Manchester) y John Williams junto a su esposa suavizar el temor al alumbramiento, que se
Elizabeth Williams de Williams.(9) exacerbaba cuando se esperaba al primogénito, o
Por otro lado, durante el siglo XIX, en las cuando se habían perdido otros hijos en esa
comunidades étnicas aisladas como la galesa en la instancia.
Patagonia, no estaba bien visto que el El hecho de que hubiera un número importante de
alumbramiento fuera ayudado por una figura parteras se relacionó con los siguientes factores: el
masculina. Entonces, es dable pensar que tanto Hews aislamiento rural, los fuertes lazos de parentesco y los
como Elizabeth Williams se encargaron de entrenar a deseos de que la persona que ayudara a parir a las
las mujeres que luego actuarían como comadronas. galesas, compartiera la misma religión, lengua y
En los comienzos, las dificultades económicas no tradiciones étnicas.(12)
amedrentaron a las mujeres que seguían teniendo
hijos. Esos niños eran una necesidad porque
constituían la mano de obra en la chacra.
(5) J. E. Gordon. “British Midwives through the Centuries. From 18th century to today”. En: Midwife Health Visitors, N° 3, London, 1967; pp.
275-281.
(6) El término comadrona proviene del latín cum mater, compuesto por cum (conjuntamente) y mater (madre). “Con la madre”: la que
acompaña a la mujer en el proceso de dar a luz.
(7) Partera es sinónimo del término anterior. Es la mujer que ayuda a otra durante el parto.
(8) Margaret Mac Donald. “Tradition as a Political Symbol in the New Midwafery in Canada”. En: BOURGEAULT, Ivy, BENOIT, C., and
DAVIES-FLOYD, R. (Eds.). Reconceiving Midwifery:The New Canadian Model of Care. Montreal/Kingstone, McGill-Queen´s University Press;
pp. 12-15.
(9) Arié Lloyd de Lewis, Semblanza de Luna. Trelew, Asociación San David, 2007; p. 24.
(10) Marlene Epp. “Midwife-Healers in Canadian Mennonite Immigrant Communities: Women who made things right”. Conrad Grebel Review
28, N° 1, Winter 2010. Waterloo (Canada). Conrad Grebel University College; p. 328-329.
(11) Arié Lloyd de Lewis, op.cit.; p. 26.
(12) J. Howard Kauffman., “Mennonite Family Life as Christian Community”. En: AIRHART, Phyllis and LAMBERT BENDROTH, (Eds.), Faith
Traditions and the Family. Louisville, Westminster John Knox Press, 1966; pp. 40-41.
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